En los últimos años, hemos presenciado un cambio progresivo del entorno geoestratégico. La incuestionable hegemonía de EE. UU. durante las últimas décadas del siglo XX ha ido dando paso a un siglo XXI multipolar en el que China cada vez ejerce mayor influencia. La Seguridad ha tomado el relevo de la eficiencia.  

En un entorno de conflictos mayores, el origen de los proveedores no es neutro. China y EE. UU. compiten por el liderazgo tecnológico, conscientes de que es un elemento esencial para contener la inflación y mejorar la productividad. La política industrial se ha convertido en un eje fundamental de la estrategia de seguridad. Estas áreas de riesgo exigen que los Consejos de administración les dediquen tiempo de calidad. ¿Cómo afecta la seguridad nacional a las decisiones de negocio? ¿En qué aspectos debemos poner foco desde las empresas y los Consejos de administración?